Soluciones inteligentes: Cómo la tecnología en el hogar mejora el confort y la salud

Un sistema inteligente que pueda llamarse así debe realizar bien las tareas importantes y ofrecerle beneficios tangibles como:

• Simplificar tu vida haciendo algo por ti: como ajustar la calefacción gestionando el encendido y apagado de forma autónoma


• Te ayudarán a ahorrar dinero. ¿Aparatos siempre en espera? Puedes programar los enchufes inteligentes para que se apaguen cuando no los necesites


• Aumenta tu seguridad: los sistemas de vigilancia inteligentes reconocen los movimientos y ruidos sospechosos y te avisan en tiempo real con notificaciones a tu móvil

Además de proporcionarte más seguridad y facilitarle el día a día, los sistemas inteligentes también pueden controlar y mejorar aspectos de la salud como la calidad del clima interior. ¿Un ejemplo? Gestión inteligente de las ventanas del tejado, para que el aire siempre esté limpio en casa y el clima sea el óptimo.

Las cifras hablan por sí solas: pasamos el 90% de nuestro tiempo en interiores donde la calidad del aire influye de distintas maneras en nuestra salud y bienestar mental y físico:

• Cuando el aire es fresco y limpio en el hogar, se puedes sentir y es una fuente inmediata de bienestar


• El aire viciado y contaminado tiene efectos negativos sobre la salud, desde las migrañas hasta la escasa capacidad de concentración y las dificultades respiratorias


• Una buena ventilación mejora la salud y el bienestar, ayuda a mantener la concentración y la productividad y a relajarse: piensa en lo importante que es en la habitación de los niños, en la zona de trabajo o estudio o en el dormitorio para dormir mejor

Confiar la ventilación a un sistema inteligente te permite tener siempre aire limpio en casa, sin tener que acordarte de abrir y cerrar las ventanas.

Otro tema importante es el ahorro de energía que puedes conseguir cuando un sistema inteligente te ayuda a climatizar tu casa optimizando el uso de los equipos o ajustando el cierre de las protecciones solares (persianas y cortinas).

Los resultados pueden hacerse evidentes en las facturas de luz y gas, pero no sólo eso: un mejor uso de la calefacción y el aire acondicionado y una mejor protección contra el calor y el frío reducen el uso de las fuentes de energía y mejoran el impacto de la vivienda en el medio ambiente.

Incluso cuando se trata de controlar y garantizar un buen clima interior, una solución verdaderamente inteligente debe tener tres características:

• Comodidad y facilidad de uso con una aplicación para móvil que permite acceder a todos los controles disponibles y programar las acciones preferidas


• Supervisión constante y notificaciones en tiempo real para saber cuándo es necesario actuar, incluso a distancia


• Funcionamiento automático: un sistema inteligente controla la calidad del aire por ti y toma las medidas adecuadas para mejorarla

¿Qué define un buen clima interior? Hay varios indicadores principales de la calidad del aire.

El dióxido de carbono está presente en el aire, lo producimos al respirar y no es peligroso si se mantiene en la concentración adecuada, por lo que hay que vigilar sus niveles. Ventilar varias veces al día es esencial para mantener una buena calidad del aire.

Un exceso de humedad en el hogar favorece la condensación y el moho, que pueden causar daños respiratorios y alergias. Una buena ventilación ayuda a controlar la humedad en todas las habitaciones, especialmente en el baño y la cocina.

El polvo, la pintura y otras partículas que se desprenden incluso de objetos cotidianos como los juguetes y los muebles de los niños empeoran la calidad del aire: además de prestar atención a la higiene, la limpieza de las habitaciones y la elección de los materiales, la ventilación ayuda a evitar los efectos nocivos de estos contaminantes.

Una casa demasiado calurosa tampoco es buena para la salud, al igual que el uso excesivo del aire acondicionado: para tener un buen clima interior, es importante tener una temperatura lo más constante y agradable posible, y la ventilación natural ayuda a conseguirlo.

Teniendo en cuenta lo importante que es un buen clima interior en el lugar que nos acoge tantas horas al día, merece la pena pensar en un sistema inteligente que lo controle y actúe siempre que sea necesario: cuando entran en juego las ventanas de tejado, la solución inteligente se llama VELUX ACTIVE.

Las ventanas de tejado contribuyen en gran medida a mejorar el clima interior: aportan más luz que ayuda a calentar la casa durante los meses más fríos y ayudan a reducir la temperatura interior en verano mediante una ventilación eficaz y gracias a los sistemas de protección del calor como las persianas y los toldos.

Esta valiosa contribución es aún mejor con un sistema como VELUX ACTIVE con NETATMO: sus sensores inteligentes controlan continuamente los niveles de CO2, humedad y temperatura en el interior y, si detectan parámetros no estándar, intervienen de forma autónoma abriendo y cerrando ventanas y persianas. Cuando una habitación está controlada por VELUX ACTIVE, puedes estar seguro de que se ventilará varias veces al día.

VELUX ACTIVE también utiliza los datos meteorológicos para regular el uso de las ventanas: cuando hace mucho calor, puedes abrirlas a menudo para ventilar y bajar la temperatura interior, ayudándote a limitar el uso del aire acondicionado y a ahorrar en el consumo de electricidad.

Además, gracias a la aplicación, puedes controlar las ventanas, persianas y cortinas en cualquier momento y establecer los parámetros que prefieras, como la temperatura y la frecuencia de ventilación.

Tener un hogar inteligente y saludable es posible: con VELUX ACTIVE tienes una solución más para mantener la calidad del clima interior de tu hogar bajo control en todo momento y garantizar el bienestar y la salud de toda la familia.